Hace muchos años, yo al igual que muchísima gente pensaba que para ser bueno en las ventas había que saber “marear” a la gente y que un vendedor por lo general era una persona que solo quería mi dinero.

Tiempo después, alguien me hizo darme cuenta de que YO era un buen vendedor. Obvio, lo primero que pensé fue: ¿YOOOO? ¡NO PUEDE SER! ¡YO NO VENDO!

Más adelante, después de conocer a mis mentores Robert Kiyosaki y Blair Singer, supe que simplemente cuando abrimos la boca para decir cualquier cosa, estamos vendiendo algo. ¡Ouch! 

¿Cómo es eso? Muy fácil, mira…

Siempre que nos expresamos, la forma en que lo hacemos y desde luego, con lo que decimos… estamos vendiendo una opinión, un punto de vista, una postura pues.

Tratando de resumir algo complicado en pocas palabras, venimos a este mundo a aprender y para hacerlo, experimentamos deseos de alcanzar sueños y metas, es decir, comprar una casa, buena comida, un aaaauto, encontrar pareja, viajar por el mundo, en fin,  lo que se te ocurra.

Querer manifestar y aprender a manifestar nuestros sueños, es algo con lo que lidiamos la mayor parte de nuestra vida. Y lo que te puedo decir, es que la habilidad (dependiendo qué tan bien la desarrolles) que te ACERCA a todo lo que deseas, es el arte de la persuasión… la habilidad de vender, porque para dar el primer paso siempre tienes primero que venderte a ti mismo tus ideas. 

Para hablar de este tema tan apasionante invité a Cris Urzua, quien es un experto y reconocido maestro de las ventas en América Latina. Hablaremos sobre los mitos, las falsas creencias y cómo abrazando y no rechazando al vendedor que llevas dentro puedes incrementar tus ingresos prácticamente de la noche a la mañana.

¿Cómo podemos ser mejores vendedores?
¿De dónde proviene una mentalidad de escasez?
¿Solamente los extrovertidos pueden aprender a vender?
¿Por qué a algunas personas se les dificulta vender?
¿Cuál es la venta más importante de todas?