Cómo ser resiliente
abril 5, 2023
Esta semana, te comparto 12 consejos con los cuales, usando tu inteligencia emocional podrás adaptarte a la adversidad y salir más fuerte de cualquier prueba que tengas en la vida.
1. Obsérvate, conócete y regálate tiempo. Conocerte mejor y fortalecer tus cualidades te permite una adaptación positiva al cambio.
2. Háblate con cariño y respeto. Sé flexible contigo mism@, permítete sentir, evita caer en la autoexigencia o el perfeccionismo, respeta tus ritmos y ten siempre presentes tus capacidades.
3. Toma con humor las dificultades. Fomenta los momentos agradables, pues te ayudará a desconectar, a liberar la tensión y a tomar fuerzas.
4. Encuentra la lección en la adversidad. Un problema puede ser una oportunidad para aprender y entrenar tus capacidades. No te centres en el problema y en la queja. Ve por soluciones y aprende de la experiencia.
5. Identifica tus emociones y aprende a manejarlas. Las emociones guían tus decisiones, tus motivaciones y tus ilusiones. Aprende a identificarlas, regularlas y aceptarlas para decidir cómo quieres vivir, fomentando tu bienestar y tu paz.
6. Comparte tus emociones. Al ser resiliente podrás liberar tus emociones ante situaciones adversas, te será más fácil expresar lo que sientes y piensas sin dañar a otras personas. Déjate ayudar y pide ayuda cuando la necesites.
7. Contacto social. Elige con quién quieres vivir, crecer, aprender y compartir tu tiempo. Te hará tener una mente más abierta, flexible y más tolerante ante las circunstancias.
8. Pon límites al control. Es normal querer tener la seguridad y la tranquilidad de saber lo que va a ocurrir, pero no es posible tenerlo todo bajo control.
9. Mejora tu salud física. El exceso de cortisol te mantiene en alerta constante, disminuyendo tu pensamiento asertivo, tu proactividad y afectando físicamente a tu sistema inmune. Si cuidas tu cuerpo, podrás contrarrestar los efectos que generan las situaciones de adversidad.
10. Sé realista. En la vida no hay acontecimientos buenos o malos, las cosas son como son. Recuerda que no todo “te pasa a ti”.
11. Cuida tu atención. La ansiedad, la inquietud, el nerviosismo o el enojo, pueden dificultar una buena interpretación de la realidad. Dependiendo de dónde enfoques tu atención, te sentirás de un modo u otro.
12. ¡Vive! Que el miedo no condicione tu vida. No te sientas atrapad@ por tus pensamientos o por emociones como el miedo, la impotencia o la vulnerabilidad. Trabaja para aceptarlas y regularlas, toma las riendas de tu vida y sé más libre.
Recuerda que ser una persona resiliente no es algo innato, aunque algunas personas nacen con una mayor facilidad para afrontar las dificultades, puedes aprender y entrenar tu capacidad para afrontar la adversidad con el menor impacto emocional.
Te mando un abrazo con mucho cariño.
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